El Sirviente y La Princesa {EPILOGO actualizado}

Hola a todos, bien ahora vengo aqui a mostrarles un fic que escribi que publique anteriormente, pero lo borraron asi que creo que algunos no lo leyeron, lo colocare de nuevo aqui...

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El Sirviente y La Princesa

Prologo:

En el año 1876, existió un reino lleno de hermosos paisajes y gran naturaleza. En ese reino gobernaba una malvada, cruel, despiadada y engreída princesa de 16 años de edad, esa princesa se hacía llamar Caroline Kenford. Una princesa muy malvada pero muy bella con un cabello dorado como el sol, ojos azules como el cielo y una piel blanca como la nieve.
A su lado su fiel sirviente llamado Daniel Kendrik, él era similar a la princesa su cabello y sus ojos eran iguales a los de la princesa. Aunque la princesa era malvada y tirana, él no se molestaba ya que para él su princesa era especial. Con el tiempo llegaron al reino dos invitados, El Principe Ciel Phantomhive y su mayordomo Sebastian Michaelis. Desde que llegaron al palacio ocurrirán situaciones divertidas y extrañas.

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Espero que les guste....!!!

Bueno, ahora el primer capitulo..!!!

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Capítulo 1: La Tirana Princesa.

La princesa Caroline Kenford se encontraba su gran castillo. Ella estaba sentada en su trono con su sirviente a un lado. Ella con su actitud ruda, cruel y soberbia. Este día era el peor día que podría tener la princesa ya que los campesinos iban al castillo a reclamar ya fuera por dinero, por atención o por comida. Pero a ella no le importaba lo que le pasara a su pueblo, era muy fácil deshacerse de los exigentes campesinos con solo una orden a sus guardias…

-No me importa, si tu familia se está muriendo de hambre- dijo la princesa Caroline.

-Usted realmente es malvada-dijo el campesino en un susurro.

Sin embargo Caroline escucho lo que dijo el campesino.

-¿¡Que has dicho?!, ¡Guardias Maten a este inútil campesino!-ordeno Caroline.

Los guardias se acercaron al campesino, lo arrodillaron en el suelo y uno de los guardias lo decapito con su espada.
Caroline rio a carcajadas ante el acto, para ella era muy divertido deshacerse de esos inútiles humanos. Pero fue interrumpida por su sirviente

-Princesa-dijo el sirviente con una voz muy pacífica.

-¿Qué ocurre, Len?-dijo Caroline con un tono poderoso pero dulce en la voz.

-Princesa, discúlpeme, pero no cree que ya es suficiente, ya ha mandado a decapitar a 45 campesinos en el mes-dijo Len.

-Es cierto, fue suficiente. Len quiero ir al pueblo a dar un paseo-.

-Sí, Princesa-.

Ambos se alistaron y fueron al pueblo. Después de hacer algunas compras, Caroline quiso ir a pasear por un pequeño bosque que estaba cerca del pueblo.
Para una princesa como Caroline, todo lo que tenía era perfecto, su reinado, sus joyas, su fiel sirviente, lo único que le faltaba poseer era el verdadero amor.
El sirviente por su lado no hacía más que escuchar las palabras de Caroline. De pronto sin querer se tropezó y se le cayeron todas las cajas y bolsas que llevaba en las manos…

-Len, ¿eres tonto o qué?, levanta todo-dijo Caroline muy molesta.

-Lo siento mucho, Princesa, fue sin intención-dijo Len levantando con rapidez las cosas.

Siguieron caminando, hasta que de pronto un pequeño niño se acercó a la princesa Caroline, el niño saludo a la princesa y esta solo lo miro con una mueca de asco en el rostro y le dijo:-Lárgate de aquí ahora mismo, repugnante campesino-, y en un impulso le dio una cachetada al pequeño niño.
El pequeño niño se fue corriendo llorando, Len se quedó mirando a su princesa con una mirada de desacuerdo, mas no podía hacer nada para reclamarle, ya que no quería ser ejecutado por orden de su princesa.
Después de unos minutos volvieron al castillo.

. . . . . . . -Horas más tarde-. . . . . .

Caroline se encontraba en su habitación. Ella solo miraba su reflejo en el espejo. Además de malvada, era muy engreída, en el mundo nadie podría compararse o tener más belleza que ella.
De pronto alguien llamo a la puerta de su habitación, ella ordeno que entrara. Y en la habitación entro Len…

-Princesa, ha llegado una carta para usted-dijo Len entregándole la carta a Caroline.

-¿de quién es?-dijo Caroline tomando la carta.

-Es del rey del país vecino, el Rey Vicent Phantomhive-dijo Len.

La princesa abrió el sobre y leyó la carta…

-¿Qué ocurre, Princesa?-dijo Len.

-El Rey Phantomhive va a reunirse mañana conmigo, tendré que hablar con ese aburrido anciano.-dijo Caroline con mucho fastidio.

Caroline se quedó mirándose en el espejo, mientras que Len muy callado y tranquilo se preguntaba por qué el Rey Phantomhive desearía reunirse con su princesa.

. . . . . -Esa noche-. . . . .

Caroline estaba por ir a dormir, pero ella no podía dormirse sin antes de que su sirviente le contara una historia…

-Que descanse, princesa-dijo Len.

-Espera Len, me podrías contar una historia-dijo Caroline sujetándolo por la muñeca.

-Claro, Princesa – dijo Len, luego pensó…-Ha escuchado esta historia, si usted escribe un deseo en un pergamino, lo coloca en un botella y luego…-

Después de que Len le contara la historia a su princesa, se despidió de ella y se fue a su habitación.

. . . . .-En la habitación de Len-. . . .

Len estaba durmiendo y soñaba:

. . . . *Sueño de Len*. . . .

Len estaba en un campo con mucha naturaleza, se encontraba recostado en el césped, con su cabeza recostada en el regazo de Caroline.

-Mi amada princesa, te amo con toda mi alma-dijo Len.

-Yo también te amo, Len-dijo Caroline.

-Mi princesa yo jamás te abandonare, yo con mi vida te protegeré y cumpliré todas tus ordenes-

-¿Todo lo que yo desee tú lo harás realidad, Len?-

-Sí, yo solo quiero que mi princesa sea feliz-

-Entonces quédate conmigo, porque cuando tú estás conmigo soy realmente feliz-

-Ya veo, pero si yo falto seré remplazado-

-Eso jamás, tú eres muy especial para mí-

Len sonrió…

. . . .*Fin del sueño*. . . .

Len se despertó de pronto, y recordó lo que había soñado y pensó: ‘‘Si pudiera algún día pueda decir este gran secreto a mí amada Princesa’’. Len sonrió dulcemente al recordar la hermosa mirada de su princesa.

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Espero que les agrade un poquito aunque sea...!!!
Se aceptan criticas, tomatazos, abucheos y muchas cosas mas...!!!

waaa!!

me gusto El Sirviente y La Princesa {EPILOGO actualizado} 344343

y eso que dices que no sabes escribir Len n.n

espero con ansias el otro capitulo n.n

¡Leído ya! owo

Oh... dios... mio... ¿estaré ciega... o éste es un fic basado en la Saga "Story of Evil"? Sí es así... ¡Yo seré tu fiel lectora! ¡Adoro esa saga! *w* Aunque como me hizo llorar el final T-T

Pues ya que al final del capítulo pediste tomatazos... ¡Wiiii! *arrojo tomates sin parar* No todos los días dan permiso para ello :3 ejem-ejem... ahora sí, alo importante uwú Pues vi que el relato era demasiado apresurado y algo corto a mi parecer. Sugeriría que te tomarás un poquito de tiempo para agregar unos cuantos párrafos de descripción del ambiente (habitaciones, calles y eso) y de los personajes (sus formas de vestir y eso)

PD: El detalle que noté... cuando mencionaste en el prólogo le nombre del sirviente "Daniel Kendrik", noté que aunque lo llamaste así, en el relato la princesa se refería a él como "Len". No sé si te confundiste de nombres jeje También sé que es un fanfic, pero por si acaso no estabas seguro de cual era el nombre de Rin en la "Story of Evil", allí se llamaba "Riliane Lucifen d'Austriche" y el sirvientito/Len se llama "Allen Abaddonia". Y el Reino que la Princesa gobierna es Lucifenia, espero te sirvan estos datos :3

PD2: ¡Oh, my god! ¿¡El rey Vincent Phantomhive!? xDDDDD

Espero aceptes mis consejos y también la continuación ;3

¡¡NOS VEMOS!!

saga evil :O (lo note apenas empece a leer la sinopsis) de vocaloid Very Happy

a mi me encanta esa saga en especial por que es cantada por mis vocaloid favoritos rin y len y ademas la historia D; es hermosa empeare a leer este fanfic

Hola de nuevo..!!! Bueno antes del capitulo, hablare un poquito mas..!!

Rose Knightley: Muchas gracias por su comentario Joven ama, de verdad se lo agradezco mucho..!!

Pandora Michaelis: Gracias por tu comentario, con respecto si es basado a la saga ''Story Of Evil'', pues si, es basado a esta hermosa y triste saga de vocaloid, y como es un fanfic por los mismo tendra algunas diferencias a la original...
Gracias por tus consejos los tomare mas en cuenta...pero recuerda que soy solo una principante en esto, en realidad no se escribir..Con respecto a lo del nombre del sirviente ''Daniel Kendrik'' y la princesa le dice ''Len'' a eso le vas a encontrar la respuesta en este capitulo...Y si estoy seguro de cuales eran los nombres de la princesa y el sirviente en la saga pero como ya dije es un fanfic basado no adaptado por eso tiene diferencias con la original..Bueno gracias por tus consejos y tu comentario.

LiZzY1: Gracias por tu comentario y espero que te guste el fic...

Bueno eso es todo vamos con el capitulo n°2:
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Capítulo 2: Un invitado.

Al día siguiente; La princesa Caroline estaba leyendo un libro, muy pacíficamente…Y de pronto Len la interrumpió…

-Princesa, El Rey Phantomhive ha llegado-dijo Len.
-Bien, acabemos de una vez con lo que quiere ese aburrido anciano -dijo Caroline.

Caroline y Len se dirigieron al salón principal del castillo. Al entrar al salón vieron a un hombre vestido elegantemente, con el cabello negro-azulado y los ojos marrones. A su lado se encontraba un joven similar a él, solo que con los ojos azul profundo, y otro hombre con el cabello negro-azabache y los ojos carmesí, vestido con un elegante traje negro.

-Buenos días, Rey Phantomhive-dijo Caroline.
-Buenos días, Princesa Kenford-dijo el Rey Phantomhive.
-¿Para qué solicito reunirse conmigo el día de hoy?-
-Primero que nada quiero presentarle a alguien, él es mi hijo Ciel-.

El Joven se acercó a Caroline y beso su mano en gesto de respeto.

-Un gusto conocerla, Princesa Kenford-dijo Ciel.

-El gusto es mío, Príncipe Phantomhive-dijo Caroline.

-Bueno, Princesa Kenford, he solicitado reunirme hoy con usted, porque mi hijo tiene algo que decirle-dijo el Rey Phantomhive.

-Princesa Kenford, ayer estaba de visita aquí, y la vi pasear por el pueblo y debo decir que quede prendado de su belleza, perdóneme el atrevimiento, ¿aceptaría casarse conmigo?-dijo Ciel.

-¿¡de verdad?!-dijo Caroline muy sorprendida.

-sí, ¿aceptaría?-

-Bueno, es muy pronto ya que apenas lo acabo de conocer y tendré que pensarlo-

-No se preocupe, tómese el tiempo que necesite-

-No te puedo dar una respuesta ahora, tengo una idea, tendremos que conocernos más, así que por que no te quedas en el castillo como invitado durante un tiempo y luego que vea te daré mi repuesta, ¿Qué dices?-

-Bien, como usted quiera-

-Perfecto, es maravilloso, mi hijo se quedara aquí por un tiempo, aproximadamente 1 mes, ¿les parece bien?-dijo El Rey Phantomhive.

-Está bien para mí-dijo Caroline.

-Está bien estaré aquí durante 1 mes-dijo Ciel.

-Bien, yo me tengo que ir, hay muchos asuntos que atender en mi reino-dijo El Rey Phantomhive.

-Buen viaje, Rey Phantomhive-dijo Caroline.

-Adiós padre, Buen viaje-dijo Ciel.

-Adiós, gracias-dijo El Rey Phantomhive y luego se marchó en su carruaje.

Después Caroline se dio cuenta de que ese hombre de ojos carmesí no se había ido con el padre de Ciel…

-¿Quién es el?-dijo Caroline.

-Él es mi mayordomo, su nombre es Sebastián Michaelis-dijo Ciel.

-Gusto en conocerla Lady Kenford-dijo Sebastián e hizo una reverencia.

-El gusto es mío, Señor Michaelis, él es mi sirviente, Daniel Kendrik pero le digo Len-dijo Caroline.

-Gusto en conocerlos, Príncipe Phantomhive y señor Michaelis-dijo Len haciendo una reverencia.

. . .-Horas después-. . .

Era la hora del té, así que Len fue a la cocina a preparar todo, Len sabía que a Caroline no le gustaba que él se tardara.
Después de unos minutos, todo estaba preparado, Len tomo una bandeja de plata y coloco ahí todo lo necesario para la hora del té. Tomo la bandeja y se dirigió a la puerta, pero se tropezó y se le resbalo de las manos la bandeja. De pronto vio que una sombra paso enfrente de él y evito que todo cayera al suelo.
Len al mirar quien era, se dio cuenta que era el mayordomo Sebastián Michaelis…

-Debería tener más cuidado, joven Kendrik-dijo Sebastián.

-No fue a propósito, me tropecé-dijo Len un poco molesto.

-Ya veo, espero no sea tan descoordinado la próxima vez-

- Tú estas aquí es por tu amo y no para darme ordenes-Len le arranco la bandeja de las manos a Sebastián y se fue.

Sebastián sonrió burlonamente, sabía que Len estaba avergonzado por que él era mejor que Len.
Sebastián no le dio mucha importancia, y regreso a el salón principal del castillo.

Después de la hora del té, Caroline dijo que quería ir a dar un paseo a caballo junto con Ciel, y Len guio a Ciel, Sebastián y Caroline a las caballerizas.

-Bien, ¿Príncipe Phantomhive, elija un caballo?-dijo Len.

-Yo elijo ese-dijo Ciel mientras apuntaba a una yegua de color blanco.

-Disculpe, pero esa yegua es Josephine y está restringida ya que solo la puede montar la princesa-dijo Len.

-Mil disculpas, entonces…elijo ese-dijo Ciel apuntando a un caballo de color negro.

-Bien, ese es Altanero, debo advertirle que no se llama Altanero por nada, ese caballo es difícil de domar y sobre todo si un extraño es quien lo monta-

-No te preocupes, mayordomo, he montado caballos desde que tenía 11 años, lo domare-

-Bueno, Príncipe Phantomhive veo que no tendrá problemas sobre todo si tiene su mayordomo a un lado-Len sonrió con un poco de burla y fue con Caroline.

. . .-Paseo en el bosque -. . .

Caroline estaba un poco distraída ya que solo se quedaba mirando a Ciel. Len estaba un poco celoso de que su princesa se le quedara mirando a otro.
De pronto el caballo de Ciel se descontrolo y comenzó a relinchar y a moverse mucho. Entonces Ciel cayó del caballo, pero en un movimiento muy rápido Sebastián tomo a Ciel en brazos evitando que cayera al suelo. Len y Caroline se quedaron muy sorprendidos, de verdad el mayordomo de Ciel era extraordinario…

-Increíble, tu mayordomo no parece humano-dijo Caroline sorprendida.

-Sebastián es muy talentoso, pero no me impresiona tanto-dijo Ciel ya de pie en el suelo.

-Como mayordomo de la familia Phantomhive que pasaría si no pudiera hacer algo tan simple como esto-dijo Sebastián.

-Deja de presumir, creo que es mejor volver al palacio-dijo Ciel.

-Claro, Len volvamos al palacio-dijo Caroline.

Len asintió con la cabeza y obedeció a su amada princesa.

. . .-Esa noche -. . .

Caroline estaba por ir a dormir. Len estaba preparando todo para que su princesa descansara y en un instante vio que en una mesa que había en la habitación, estaban un montón de papeles regados, se acercó a la mesa y tomo uno, y se dio cuenta que eran poemas, leyó el papel:

‘‘

Sera sin avisar...
Ocurrirá de repente.
En un descuido tuyo,
Mi recuerdo aparecerá en tu mente.

Algo en el aire te recordara mi perfume,
Sentirás el mismo latir en tu corazón
Que en la noche por primera vez
Se unieron tu aliento y mi respiración.

Una sonrisa aparecerá en tu rostro.
Tus ojos se llenaran de roció
Como un aluvión lloverán sobre ti,
Todos los bellos momentos vividos...

Y reirás y lloraras
Tu mente recordara otros tiempos
Y te hará comprender,
Que hasta el momento,
Nadie te ha besado
Como yo al darte mis besos.

Y anochecerá la sonrisa en tu rostro
Y el roció se habrá convertido en llanto,
Y comprenderás que nadie
Pudo quererte tanto...
Tanto... Como yo te estoy amando.

’’.

Len se quedo mudo dé la impresión, no podía creer que su princesa hubiera escrito algo tan bonito, sobretodo por que ella siempre aparentaba ser malvada y cruel, y en ese poema mostraba algo de sensibilidad.

-¿Qué haces leyendo eso?-dijo Caroline al verlo leyendo ese poema.
-Disculpe si se molesto princesa, pero es muy bonito lo que usted escribió-dijo Len.
-Gracias, aunque son poemas de una principiante-
-Claro que no princesa, sus poemas parecen hechos por una profesional, es una gran poetisa princesa-
-Gracias Len, siempre apoyándome-
-Bien, princesa es hora de dormir-

Caroline se acostó en su cama…

-Len, ¿puedes contarme una historia para dormir?-

-Claro Princesa, ¿Qué historia quiere que le cuente?-

-Cuéntame una historia de amor que sea bonita-

-¿Que le parece La Bella y La Bestia?-
-Si esa es muy bonita-

-Bien…- y Len comenzó a contar la historia..

----Narracion de La Bella y La Bestia----

Hace muchos años en un país muy lejano, un joven príncipe llamado Len, vivía en un castillo muy hermoso. A pesar de poseer todo lo que deseaba el príncipe era egoísta y duro de corazón.
Una noche muy fría una vieja pordiosera llamo a las puertas del gran castillo. A cambio de posada para resguardarse del cruel frio la pordiosera le ofreció al príncipe una rosa. El príncipe Len asqueado por la apariencia de la pordiosera no acepto el regalo y le pidió que se marchara de inmediato. La pordiosera le dijo que no se dejara llevar por las apariencias pues la autentica belleza se lleva en el interior, le ofreció otra vez la rosa y el príncipe le repitió otra vez que se fuera. Y enseguida la pordiosera se convirtió en una hermosísima hada. El príncipe Len intento pedir disculpas pero el hada ya había visto que en el corazón del príncipe no había amor, así que para castigarlo el hada convirtió al príncipe en una horrible bestia, y lanzo un hechizo sobre el castillo y todos los que vivían en el convirtiéndolos en objetos domésticos.

La rosa que ella le había regalado al príncipe quedo bajo el encanto. Esta duraría hasta que el príncipe llegara a la edad de veintiún años. Si el príncipe lograba amar y ser amado antes de que cayera el último pétalo de la rosa, el hechizo se rompería. De lo contrario, se quedaría así para siempre.
Avergonzado de su forma monstruosa, la bestia decidió encerrarse en su castillo. Un espejo mágico era su única ventana hacia el mundo exterior. Mientras los años pasaban la bestia comenzaba a desesperarse, él estaba seguro de que nunca llegaría a ser amado. La rosa empezó lentamente a marchitarse.

En una población cercana vivía una jovencita llamada Yumee. Era muy hermosa y algo diferente al resto de las chicas. Ya que solo le interesaban sus libros y se sentía incomoda cuando se reunía con los demás.
Su hermana Kaiko, también era una gran lectora. A diferencia, que Yumee leía libros de romance y aventura, Kaiko leía libros técnicos, ya que Kaiko era una inventora. Una genio según Yumee, y una chiflada según la gente del pueblo.

Reyko, el hombre mas apuesto del pueblo, quería de Yumee fuera su esposa, aunque la joven pensara que él era un tonto.
Cierto día, Kaiko creo una maquina para cortar leña, y decidió llevarla a una feria, pidiéndole a Yumee que se quedara en casa a esperarla, sin saber lo que le esperaba se adentro en el bosque, pero perdió el rumbo y fue atacada por una manada de lobos, asustada cayo del caballo el cual huyo por el sendero, y Kaiko solo pudo escapar a pie y tratando de huir de los lobos corrió y corrió hacia las profundidades del bosque. Kaiko llego por fin a un castillo que parecía deshabitado y entro.
Allí se topo con una mesa con un candelabro, y un bello reloj de mesa, le pareció extraño... que no hubiera nadie, ya que oía murmullos, de pronto alguien la saludo amablemente, Kaiko tomo el candelabro buscando a alguien... y se asusto mucho cuando descubrió que el candelabro era quien la saludaba. Kaiko se asusto, y soltó al candelabro nerviosa, y se asusto aun más al ver que el reloj se movía de su lugar y reprendía al candelabro.

-Mira lo que has hecho, Yuuki-dijo el reloj

-vamos Patch, no te enojes la joven esta empapada y necesita asilo para descansar y resguardarse del cruel frio-dijo el candelabro

-¿Y que harás si el amo Len se entera de esto?-

-Cálmate, no se enterara a menos que tu le digas algo-dijo Yuuki conduciendo a Kaiko ante la chimenea para que pudiera calentarse.

-Yo, eso jamás. Oh no, no en el sillón del amo Len-dijo Patch al ver que Kaiko tomaba asiento en el gran sillón que estaba frente a la chimenea.

Pero antes de que pudiera detenerlo, se interpuso en el camino un carrito de té que llevaba una tetera y una tacita de porcelana. La tetera le sirvió té a Kaiko, cuando ella bebió, la pequeña taza comenzó a reír y a moverse ya que tenía cosquillas.

-Por favor Raven, compórtate con nuestra invitada-dijo la tetera llamada Rose.

-Lo siento, perdóname mamá-dijo la tacita Raven.

Kaiko estaba muy confundida en ese momento e iba a preguntar que ocurría, cuando apareció una criatura aun mas extraña que las otras, era la bestia quien rugió con ira.

-Disculpe, me he perdido en el bosque y solo buscaba asilo-dijo Kaiko asustada ante la bestia.

-Ah si, pues tengo un lugar perfecto para darte asilo-rugió Len muy enojado.

Así que tomo a Kaiko y se la llevo casi a arrastras hasta un calabozo.

Mientras Yumee estaba sola en casa. Reyko planeo que era la hora de casarse con ella, pero no contaba con la astucia de Yumee, la cual termino por echarlo de la casa cuanto antes. Después de unos minutos, el caballo regreso a la casa. Yumee supuso que algo terrible le había pasado a su hermana. Así que le quito la carreta donde traía el invento de Kaiko, y se monto en el lomo del caballo.

-Rápido llévame con mi hermana ahora-dijo Yumee preocupada.

Al llegar al castillo, Yumee busco afanosamente a su hermana. Los objetos encantados la condujeron hasta el calabozo donde estaba encerrada Kaiko. Pero Len apareció y Yumee grito aterrorizada, aunque luego con gran valentía se ofreció a tomar el puesto de su hermana y la bestia lo pensó y después acepto el trato. Y sin que Yumee tuviera tiempo de despedirse de su hermana, Len tomo a Kaiko y la llevo hasta un carruaje que la llevaría al pueblo.
Después la bestia volvió al lado de Yumee, la bestia llevaba consigo al candelabro Yuuki.

-Amo Len, debería ofrecerle una habitación más cómoda, una mazmorra no es lugar para una dama, ya se lo dijimos una vez y no escucho-dijo Yuuki.

Len se convenció con lo que dijo Yuuki y llevo a Yumee a una habitación.

-Vas a acompañarme a cenar, ¡¡¡Es una orden!!!!-dijo Len.

Yumee lloro desconsolada, ahora era una prisionera, y había perdido su vida por siempre.
En cuanto a Kaiko, cuando llego al pueblo se dirigió a la cantina y pidió ayuda... nadie le creyó, le dijeron loca, y la sacaron a la calle mientras se reían de ella.

Mientras Yumee estaba charlando con un amable ropero, que le decía que Len no era tan malo cuando llegaba a conocerlo.

-Yo no quiero conocerlo y mucho menos cenar con el-dijo Yumee con tranquilidad, llamaron a la puerta y era el reloj Patch quien le pidió que bajara a cenar-Le dije a tu amo que no iría a cenar con el y ese fue el fin de la discusión-.

Patch fue desanimado a decirle eso a Len, sabía que se enfurecería de sobremanera, y así fue, se enojo e incluso amenazo a Yumee con dejarla morir de hambre, y como siempre a ella no le importo en absoluto.
Después a media noche Yumee salió de la habitación y fue a la cocina buscando comida, y los objetos encantados ayudaron a preparar una cena para Yumee. Después Yuuki se ofreció a mostrarle la biblioteca del castillo, Yumee se entusiasmo cuando escucho lo de la biblioteca, pero al pasar delante de una escalera, pregunto que era ahí. Yuuki y Patch decidieron no responder.

-¿Esa es el ala oeste que su amo me prohibió?, ¿que esconde exactamente?-dijo Yumee con curiosidad.

-No, nada, nuestro amo no tiene por qué ocultar algo-dijo el reloj Patch.

-Sigamos le mostraremos la biblioteca, lady -dijo el candelabro Yuuki.

Mientras Yuuki y Patch siguieron caminando, Yumee sigilosamente subió las escaleras. Llego a la asquerosa habitación de la bestia, todo estaba sumamente destrozado. Cerca de la ventana se encontraba una rosa. Al acercarse para tocarla, la bestia apareció repentinamente por la ventana y rugió con mucha ira, y comenzó a arrojar los muebles y romperlos. Yumee asustada salió corriendo de allí. Con el corazón agitado Yumee salió del castillo montada en el lomo de su caballo y se escapo en medio de la noche. Pero una manada de lobos los rodeos. De repente Len apareció allí, espantando a los lobos, iniciándose una feroz lucha entre los lobos y Len. Finalmente los lobos huyeron pero Len quedo gravemente herido. Volvieron al castillo, allí Yumee curo las heridas de Len, mientras este gruñía dolorosamente.

-Ah, Eso duele!!!-dijo Len rugiendo de dolor.
-Si te quedaras quieto no te dolería-dijo Yumee reprendiéndolo.
-Si no te hubieras escapado no me habría lastimado-
-Si no me hubieras asustado no hubiera escapado-
-Y tu no debiste haber ido al ala oeste-
-Y tú deberías controlar tu mal genio-dijo Yumee-aunque debo darte las gracias por salvarme la vida.

En los siguientes días Len aprendió a controlar su carácter enfrente de Yumee. Cierto día Len decidió obsequiarle algo a Yumee, y Yuuki le dio la idea de que le enseñara la biblioteca que había en el castillo como un obsequio. Cuando Len le mostro la biblioteca a Yumee le dijo que era su forma de mostrarle su gratitud.
Ellos pasaban mucho tiempo juntos, leían juntos, comían juntos y Yumee le enseñaba modales de caballero a Len. Poco a poco sin pensarlo Len se enamoro de Yumee. Y entre Yuuki, Patch y Rose planearon una velada para que Len pudiera declararle su amor a Yumee.
Todo salió como lo esperaba, una cena y un baile maravilloso. De pronto Len le pregunto a Yumee si era feliz allí con el a lo que ella respondió que si pero que extrañaba a su hermana y que si tan solo tuviera un instante para verla. Entonces Len recordó su espejo mágico

-puedes verla aquí-dijo Len mientras le entregaba el espejo a Yumee.

Les enseño la imagen de Kaiko perdida en el bosque tosía frenéticamente debido a que estaba enferma.

-Oh no, debo ir a salvarla-dijo Yumee muy preocupada.
-Te dejo en libertad-dijo Len con tristeza-Pero llévate el espejo-.

Yumee le agradeció a Len y luego fue a buscar a su hermana. Con ayuda del espejo mágico encontró a Kaiko y la llevo de vuelta a la cabaña donde vivían. Pero el feliz encuentro fue interrumpido por violentos golpes en la puerta, era Reyko junto a una multitud quienes habían ido a la casa de Yumee y Kaiko, para encerrar a Kaiko en un manicomio.

-Mi hermana no esta loca-dijo Yumee mostrándoles el espejo con la imagen de la bestia-Ven, si existe pero es amable, el que parece una bestia es Reyko-

Reyko estaba furioso y convenció a todos que tenían que matar a la bestia o si no en cualquier momento podría atacar el pueblo. Y enseguida encerraron a Yumee y a Kaiko en el sótano de su cabaña. Yumee creía que no podría salir de ahí y que matarían a Len. Pero no contaba con Raven quien se había colado en la alforja de Yumee, la tacita Raven hecho a andar el invento de Kaiko. Y después de una explosión logro liberarlos.

En ese mismo instante Yumee se monto en el lomo de su caballo y fue al castillo de la bestia.
Yumee llego al castillo en el momento en que Reyko y Len se encontraban en un mortal lucha sobre el tejado del castillo. Pero Len no se defendía ya que el no tenia ningún motivo por el que luchar si sabia que había perdido a Yumee para siempre.
Yumee corrió lo mas rápido que pudo y llego al techo, Len sonrió al verla, y trepo los tejados para llegar a su lado, justo en el balcón de la habitación de Len.

-Regresaste, Yumee-dijo Len sonriendo.

Pero de pronto un enorme rugido de dolor salió del hocico de la bestia, ya que Reyko había clavado una daga en su espalda, Len manoteo y esto hizo que Reyko perdiera el equilibrio y cayera hacia al vacío del abismo.
Yumee evito que también Len cayera, lo ayudo a subir al balcón y luego lo recostó en el suelo. Len estaba a punto de morir en un momento dejo de oír la respiración de Len, y Yumee lloro desconsoladamente sobre el cuerpo de Len

-Por favor no te mueras, no mueras-sollozo Yumee-Te amo- justo en ese momento el ultimo pétalo de la rosa encantada cayo y su brillo se extinguió.

De repente el cuerpo de Len se levanto del suelo, flotando. Yumee lo miro sorprendida, el cuerpo de Len volvía a ser humano mientras era envuelto en luz mágica cuando bajo de nuevo al piso se miro las manos…

-Soy yo, Yumee, soy yo de nuevo-dijo Len

Yumee abrazo a Len y le dio un beso en los labios, una luz mágica los envolvió a ambos y esta se esparció por el castillo haciendo que todo volviera a ser normal, los sirvientes volvieron a ser humanos otra vez.
El castillo se lleno de vida y de felicidad, Len tomo a Yumee en sus brazos y bailaron juntos.
Y todos vivieron felices para siempre, el Fin.

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Bueno espero que les haya gustado..!!!!
Recuerden se aceptan abucheos, tomatazos y criticas..!!!

waaa *.*

ciel y sebas *.*
la historia empieza aponerse buena, veremos que pasa en ese mes xD

y la historia de la bella y la bestia
me gusto y gracias por nombrarme y a los de mas de la familia n.n

espero y pronto subas el otro capitulo n.n

haaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!! me encanto len te amo!!!!
sigelo siguelo *¬*
Twisted Evil

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reyko: porque me odia tanto - se va al rincón emo -

:O me encanta espero que el final no sea tan triste como el de las canciones

Bueno, Muchas gracias a todos los que leen...Aui el capitulo n°3..!!!

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Capitulo 3: Una injusticia y Un deseo.

Al día siguiente. A las puertas del castillo llamo alguien. Len abrió la puerta y se encontró con una espadachina vestida con una armadura carmesí.
-Disculpe, vengo a hablar con su majestad la princesa Kenford-dijo la espadachina
-Lo lamento, pero la princesa no puede atenderla ahora-dijo Len.
-Lo lamento mucho, pero por favor déjeme hablar con la princesa, es urgente-dijo la espadachina con un tono muy triste en la voz.

Len no tuvo elección, así que la dejo entrar. Len condujo a la espadachina hasta el salón principal del castillo donde se encontraba Caroline.

-Arrodíllate ante mi-dijo Caroline en cuanto vio entrar a la espadachina.

La espadachina no tuvo elección y se arrodillo ante Caroline.

-¿A que has venido?, Como ya dije no me importa si no tienes dinero o comida-dijo Caroline enojada.
-Su majestad, necesito su ayuda. Mi esposo esta enfermo y se esta muriendo, si tan solo usted pudiera darme un poco de dinero para comprarle las medicinas que necesita yo le estaría eternamente agradecida-dijo la espadachina implorándole a la princesa.
-Vete enterando que a mi no me importa que tu esposo se esté muriendo. No voy a darte ni una moneda de bronce-
-Por favor, Su majestad se lo suplico, solo necesito unas cuantas monedas de plata. Por favor no quiero que mi esposo muera, se lo imploro con toda mi alma ayúdeme a salvar a mi esposo-
-Ya dije mi última palabra. Ahora vete, si no quieres que te mande a cortar la cabeza-dijo Caroline y luego salió de la habitación.
-Nunca te perdonare-susurro la espadachina antes de salir del castillo.

_______.......Esa tarde.........________

Caroline y Ciel estaban en el jardín tomando té, y a su lado estaban Len y Sebastián.

-Len, ¿recuerdas lo que te hable?-dijo Caroline.
-Si, Princesa-dijo Len pacíficamente.
-Vamos ahora mismo a la playa-
-Como ordene, Princesa-
-Ciel, ¿quieres ir con nosotros?-
-No, muchas gracias Caroline, pero prefiero quedarme aquí-dijo Ciel.
-Bien si tú quieres eso, esta bien-dijo Caroline con una sonrisa en el rostro.

Luego Len y Caroline se dirigieron a la playa que había cerca de un puerto que quedaba alejado del pueblo.

-Yo suelo venir aquí todos los días para pedir un deseo al océano-dijo Len.
-¿Por qué nunca me habías dicho eso?- dijo Caroline.
-Porque creí que usted se enojaría conmigo, si sabia que estaba faltando a mis labores como sirviente-
- Dime, ¿realmente crees que esto funciona?. Es tonto creer que algo como esto hace que los sueños se hagan realidad-
-¿Le gustaría intentarlo, Princesa?-
-Aunque no necesito intentarlo, pero lo hare-
-Bien, ya sabe la historia usted escribe un deseo en un trozo de papel, lo introduce en una botella y luego lo deja en el océano, su deseo se cumplirá-dijo Len sacando de un pequeño saco de cuero un trozo de papel, una pluma con tinta y una pequeña botella de cristal.
-Bien pediré un deseo-dijo Caroline tomando el pedazo de papel y la pluma- listo, ¿ahora que?-
-Ahora, deme el papel-dijo Len tomando el papel y luego lo introdujo dentro de la botella de cristal- Y ahora dejemos que el océano cumpla su deseo-dijo Len soltando la botella en el océano.
-Dime, ¿que es lo que realmente deseas día con día?-dijo Caroline viendo como Len escribía su deseo en un papel y lo introducía dentro de otra botella de cristal.
-Siempre deseo que la señorita Caroline, tenga pechos muy grandes-dijo Len con una sonrisa en el rostro.
-¿¡Que?!-dijo Caroline impresionada.
-Solo bromeaba-dijo Len riendo- Siempre deseo que mi princesa se feliz-.
-Si quieres que sea feliz, entonces quédate conmigo por que cuando tu estas conmigo yo soy realmente feliz-dijo Caroline sonriendo tiernamente.
-¿En verdad?-dijo Len totalmente impresionado luego pensó: ‘‘Oh, es posible de verdad se hizo realidad mi sueño’’.
-Si, es la verdad-
-¿Princesa, puedo preguntarle, que deseo pidió usted?-
-Desee que tú siempre estés conmigo, esa es la única manera de que yo pueda ser feliz-
-Princesa, perdone que pregunte pero ¿usted ama al príncipe Phantomhive?-dijo Len con curiosidad.
-¿Qué?, claro que lo amo-mintió.
-No es cierto, Princesa-dijo Len mirando fijamente los ojos de la princesa-Lo se, por que su voz podrá decir una cosa pero sus ojos dicen otra cosa muy diferente-
-¿Cómo demonios siempre has tenido ese extraño poder sobre mí?-
-No es un poder, es algo llamado sentido común. En otras palabras se cuando miente y cuando no cuando miro sus ojos-
-Bueno, tal vez no lo ame pero si llegare a amarlo. Lo único que me falta es poseer el verdadero amor-
-Pero Princesa, no puede pensar en el amor verdadero como si fuera un objeto que poseer-
-¿Entonces que es?-
-Es un bonito sentimiento. Pero usted no puede pretender encontrar el amor verdadero en la persona que usted espera, el corazón es el que elige. Puede que si o puede que no encuentre el amor verdadero en el príncipe Phantomhive-dijo Len y luego pensó: ‘‘No podría soportar que mi princesa se enamorara de Ciel Phantomhive’’.
-De cualquier forma hay que ver si me caso con Ciel o no, pero eso dependerá del tiempo-
-Pero si no lo logra Princesa, ¿Qué pasara?-
-Pasara que no me casare con el, es que no lo amo ahora porque es imposible que después de algunas palabras y de la noche a la mañana me haya enamorado de él, eso se lleva con el tiempo-dijo Caroline-Len…No yo no quiero que te vayas nunca. Prométeme que no te iras, por favor prométemelo-
-Lo prometo, Princesa-Len estaba impresionado era la primera vez que su princesa que mostraba su real honestidad.
-Gracias Len-dijo Caroline mientras se acercaba a Len y luego lo abrazo.
Len se sorprendió aún más, era la primera vez desde que tenían 7 años que su princesa lo abrazaba.

-Princesa-dijo Len muy sorprendido.
-Gracias Len, tu siempre me haces sentir bien-dijo Caroline separándose de Len-Len, ¿recuerdas cuando éramos niños?-
-Si, tú siempre hacías alguna travesura, terminabas rompiendo o destrozando algo y yo me culpaba para que no te castigaran a ti-
-Si, lo lamento por eso, es que en ese entonces tenia 6 años y no entendía mucho lo que te hacían-
-Pues acepto tus disculpas, aunque un castigo para ti hubiera sido menor por que eras y eres la hija de la reina y el rey, pero para un sirviente mi castigo era pasar 3 horas encerrado en la sala de castigo siendo azotado con un látigo-
-Si, en cuanto entendí que te hacían eso yo me echaba la culpa por las cosas que hacia y solo me castigaban sin estar contigo por una semana, aunque para mi era muy doloroso ya que tu eras como mi hermano mayor-
-Princesa deberíamos regresar al palacio, el príncipe Phantomhive debe estar preocupado-
-Si, vámonos-
Y Len y Caroline regresaron al castillo.

. . .-Esa noche -. . .

Len estaba en su habitación sin poder dormir solo pensando en ese tierno abrazo que le dio su princesa esa tarde. Estaba tan feliz que se puso a escribir un poema para su princesa…
‘‘

Tú eres la princesa que reina en mi corazón.
Tu tierna mirada me llenas de alegría el corazón.

Eres tan especial para mí.
Que no puedo dormir por solo pensar en ti.
Mi amor reside en ti.
Por eso jamás te hare sufrir.

Tal vez tengas miles de amores.
Pero tú eres el único que existe para mí.

Tal vez sea celoso pero es porque te quiero.

Tal vez no te diga con mi voz que te amo.
Pero mi corazón lo grita sin parar a cada rato.

Tal vez tu no sientas lo mismo que yo siento por ti.
Pero te pido por favor que me dejes hacerte feliz.

Perdona las veces que te he fallado.
Es que no entendía que estabas a mi lado.

Sé que das todo tu amor.
Pero sin embargo,
Yo por cobarde no he sabido demostrarte cuanto te quiero yo.

Lo único que puedo darte son estas palabras.
Y espero que al observarlas, entiendas que te amo con toda mi alma.

’’.

Después de escribir ese poema Len pensó: ‘‘Pero que tonto soy, si ni siquiera puedo darle este poema a mi princesa’’.

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Espero que les guste..!!!

me gusto

espero con ansias el otro n.n

wwiiiiiiiiiiiii!!!!! te amo len El Sirviente y La Princesa {EPILOGO actualizado} 234636

te quedo bien espero el conti XXDD wiiiiiiiiii El Sirviente y La Princesa {EPILOGO actualizado} 841151

¡Yay! Actualización~

Jejeje sip, ah ok, bueno que tenga diferencias a la versión original no es nada malo y hasta me da más curiosidad por ver esas variaciones que tu añadiste a esa hermosa-pero-que-me-da-ganas-de-llorar saga (?) Jejeje me alegra que tomes en cuenta mis consejos. Descuida, todos incluso los mejores escritores alguna vez fueron estudiantes, así que poco a poco irás mejorando a medida que practiques ;3 y ah ok, bueno ya me pondré a leer para ver porque le dice Len~

Uff, leí los dos capítulos de tiro -w-U en verdad está tomando un rumbo curioso la historia, (¡yaaaay! ¡Es un fic de RinxLen, amo esa parejita Twincest-tiva). Awwwww, cuando Len narró la historia de "La bella y la Bestia" de Disney (versión Vocaloid) me recordó mi infancia, amo esa película xDDD y por fin apareció Meiko!! Very Happy

Ahora solo queda esperar a que actualizes (aconsejo que no lo hagas tan rápido, sino de un tiempito determinado, para que así la gente tenga tiempo de leer y eso) para ver como terminara este Fic, ojala que no termine trágico como "Story of Evil" TwT

¡¡NOS VEMOS!!

que bien vas desarrollando la historia cada vez se vuelve mas interesante y espero que esa espadachina no se le ocurra hacer lo mismo que hizo la de story of evil

Primero que nada, disculpen la tardanza, estuve muy ocupado ultimamente...pero no se preocupen aqui traigo en capitulo n° 4..!!

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Capitulo 4: Una decisión y una muerte inocente.

Los días pasaban muy rápido y entre Caroline y Ciel creció una amistad, pero eso fue destruido en un momento cuando Ciel se percato de la personalidad cruel y soberbia de Caroline.
Un día el rey Vicent Phantomhive decidió visitar el reino de la Traidora Inhumanidad para percatarse de como iba la relación de Caroline y Ciel. El mismo día en el que el rey Phantomhive llego Ciel y Caroline decidieron hablar con el y decirle la verdad

-Padre, yo me equivoque-dijo Ciel.

-¿En que te equivocaste, hijo?-dijo el rey Phantomhive.

-Yo ya no tolero a Caroline, fue un gran error pedirle matrimonio-

-Discúlpeme Rey Phantomhive, pero no me quiero casar con su hijo-dijo Caroline

-¿Cuál es la razón por la que se odian?-dijo el rey Phantomhive confundido

-Yo no tolero que Caroline sea tan cruel, malvada y egoísta. Yo quiero que mi esposa sea respetada por ser una persona bondadosa-

-Yo no soporto la actitud de Ciel, siempre me lleva la contraria y dice que el gobernaría mejor que yo este reino-

-Ustedes dos son polos opuestos, pero en este caso los opuestos no pueden atraerse. Pero sin embargo, ya Ciel va a cumplir la edad de 20 años y tiene que casarse antes de que sea tarde. Así que aunque ustedes no se lleven bien, se van a casar-

-¡¿Qué?!-dijeron Ciel y Caroline al unísono.

-Esa es mi ultima palabra, se casaran quieran o no-dijo el rey Phantomhive sentenciando a Ciel y a Caroline.

-Pero padre, no iras a dejar a tu hijo vivir una vida llena de odio y sufrimiento, ¿o si?-

-Si, lo hare. Tienes que aprender a no dejarte llevar por las apariencias, tuviste la oportunidad de no dejarte llevar por la belleza de la princesa Kenford pero no quisiste razonar ahora no tienes mas oportunidades aunque tu la odies y ella te odie a ti, están comprometidos y serán marido y mujer. Ahora haremos un baile e invitaremos a todos los nobles, reyes, reinas, príncipes y princesas de los países vecinos para anunciar el compromiso tuyo con la princesa Kenford-

Y Ciel y Caroline furiosos se fueron cada uno a su habitación.

. . . . . –En la habitación de Caroline -. . . . . .

Caroline entro muy furiosa a su habitación, mientras Len la siguió.
Caroline empezó a caminar de un lado para otro gritando muchas cosas y algunas incoherentes.

-Princesa, por favor cálmese-dijo Len tratando de tranquilizar a Caroline.

-Como quieres que me calme, si me tengo que casar con alguien a quien no amo, es ilógico. No quiero vivir el resto de mi vida peleando con el-dijo Caroline histérica.

-Espere, tranquilícese princesa-

-Esta bien-dijo Caroline y luego tomo aire y se calmo-No entiendo cual es el capricho que tiene ese anciano en que su hijo y yo nos casemos-

-Princesa, no ha pensado en que tal vez el rey Phantomhive quiera agrandar su reino-

-No lo creo, ese anciano es muy tonto para ello, además si su hijo se casa conmigo, en todo caso Ciel es el que será rey de mi reino no ese anciano-

-Pero el príncipe Phantomhive se puede dejar llevar por las palabras de su padre, y tomar decisiones equivocadas-

-De todas maneras, no creo que Ciel vaya a seguir haciéndole caso a su padre después de esto. Pero yo sé que tu si me apoyas en todo, ¿verdad Len?-

-Si Princesa-.

_______.......Horas mas tarde.......________

El rey Phantomhive reunió a Caroline y a Ciel para discutir con ellos sobre la boda…

-Mañana se realizara el baile, para anunciar su compromiso-dijo El rey Phantomhive

-¿Qué mañana?, es muy pronto-dijo Caroline

-No se preocupe, princesa Kenford, lo anunciaremos pero se casaran dentro de un mes-dijo el rey Phantomhive muy pacíficamente-Quiero que todo salga perfecto, ustedes deben verse felices por su matrimonio y quiero que no discutan enfrente de los invitados, ¿de acuerdo?-

-No tengo otra opción-dijo Ciel sin protestar.

-Yo tampoco-dijo Caroline algo molesta.

. . . . . . . . . . . ------------ . . . . . . . . . . . . .

Al día siguiente, en el gran baile de compromiso de Caroline y Ciel. Caroline y Ciel tenían que disimular que estaban felices y muy enamorados cuando en realidad se odian totalmente. Todo estaba saliendo justo como esperaban, todo perfecto de alguna manera.
En una parte del gran salón se encontraba Len y a su lado Sebastián, Caroline y Ciel les ordenaron que se quedaran juntos hasta que la velada terminara ya que tenían que aprender a llevarse bien. Len estaba algo nervioso porque de alguna forma ese hombre de ojos carmesí le daban temor pero no quería admitirlo.

-¿Por qué esta tan nervioso, joven Kendrik?-dijo Sebastián muy pacíficamente.

-¡¿Qué?! Yo no estoy nervioso, yo jamás estaría nervioso-dijo Len con un poco de enojo y vergüenza.

-No tiene que ocultar su vergüenza joven Kendrik, yo sé que usted esta nervioso por que tendrá que pasar la mayoría de la noche a mi lado, y créame a los dos nos molesta-

-¿A ti también te molesta?-

-Claro, aunque pensándolo bien no tengo otra cosa mejor que hacer, pero no me gusta estar atado a alguien como usted, joven Kendrik-

-¿Alguien como yo, a que te refieres?-

-No tenía intención de ofenderlo, joven Kendrik-

-No importa, en fin igualmente tú me desagradas por completo-

-Yo no dije que me desagradaba, Joven Kendrik, solo dije que no me gusto la orden que me dio mi amo de estar a su lado toda la velada. Aunque que yo le desagrade me ofende un poco-

-Sabes por ser un caballero te pediré disculpas si fuera por mi no lo haría, Discúlpeme señor Michaelis-

-No me convence mucho, joven Kendrik-

-No lo repetiré quédate con eso o no, a mi no me importa-

-Bueno, igualmente esta perdonado, joven Kendrik-

De pronto por las grandes puertas del castillo entro, una princesa muy hermosa, con el cabello castaño y los ojos azules. Len quedo maravillado con la belleza de esa princesa aunque aun así pensaba que su princesa seguía siendo la más bella de todas. Len se acercó a donde estaba la princesa y más atrás Sebastián lo seguía.

-Bienvenida al palacio-dijo Len haciendo una reverencia enfrente de la princesa.

-Muchas gracias, ¿Cuál es su nombre caballero?-dijo la princesa

-Mi nombre es Daniel Kendrik-dijo Len

-Un gusto conocerte, tu debes ser el mayordomo de la princesa Kenford, ¿no?-dijo la princesa

-Si, disculpe la pregunta pero ¿a quien tengo el honor de darle la bienvenida al reino de la Traidora Inhumanidad?-

-Yo soy la princesa Katherine Collingwood, del reino que queda al otro lado del mar-dijo Katherine

-Un placer conocerla, su majestad-

-Que caballeroso eres, y también eres muy guapo-

-Pues usted es muy bella, princesa Collingwood-dijo Len mientras sonreía nerviosamente ante lo dicho por la princesa Katherine.

-Muchas gracias, joven Kendrik-dijo la princesa y luego le dio un beso en la mejilla a Len.
Len se sonrojo y bajo la cabeza avergonzado.

-Ahora me retirare disculpe, princesa Collingwood-dijo Len, hizo una reverencia y se fue y mas atrás igualmente Sebastián siguiéndolo.

Len volvió a donde estaba anteriormente, con el rostro aun sonrojado y la cabeza baja.

-¿Le sucede algo, joven Kendrik?-dijo Sebastián.

-No, nada, no es importante-dijo Len.

-Usted esta enamorado, ¿verdad?-dijo Sebastián.

-No lo niego pero tampoco lo afirmo-

-No lo tiene que afirmar se le nota en el rostro-

-Solo ya cállate, no me interesa hablar contigo-dijo Len avergonzado y enojado.

De pronto llego Caroline con una cara de enojo, sujeto a Len de un brazo y se lo llevo.
Caroline llevo a Len a su habitación. Ya estando allí, se quedo parada enfrente de él, mirándolo con enojo.

-¿Le sucede algo, Princesa?-dijo Len confundido.

-Si, ¿como rayos es posible que tú, es decir, tú estés enamorado de esa chica?-dijo Caroline con mucho enojo.

-Princesa, no entiendo de que me habla-

-Se te nota Len, que estas enamorado de esa estúpida princesa-

-Princesa, ¿usted…esta…celosa?-dijo Len sorprendido.

-¡¿Qué?! No yo no estoy celosa, si no que no permito que te enamores de ella y de ninguna otra chica-mintió Caroline.

-Princesa-dijo Len acercándose a Caroline y mirándola a los ojos-dígame la verdad, ¿usted esta celosa?-

-Yo…-Caroline aparto la vista rápidamente-Claro que no, no estoy celosa, yo no podría estar celosa y mucho menos por alguien como tu, eres solo un sirviente-

-Puede que sea solo un sirviente, pero yo tengo sentimientos Princesa, y lo que acaba de decir me ofendió de alguna forma. Usted me hace sentir insignificante-

-Len…-dijo Caroline con la cabeza baja-Deshazte de esa chica, ahora-

-¿Qué?, pero Princesa yo no puedo hacer eso-

-Hazlo por que yo te lo digo, es una orden directa. Es más, quiero que la mates, no quiero ver a esa chica más nunca-

-Como ordene, Princesa-dijo Len y se marcho de la habitación.

____________

Len creo un plan para atraer a la princesa.
Primero se acercó a ella, luego se presento y después le dijo que tenía que decirle lago muy importante. Y Len llevo a la princesa Katherine al jardín trasero del palacio que estaba completamente solo.

-Princesa Collingwood, yo tengo que decirle algo que no es fácil para mi decirlo-dijo Len

-¿Qué es?-dijo Katherine.

-Es que yo estoy enamorado de usted-

-Oh, no me esperaba esto, eres muy guapo, y eres muy caballeroso pero yo me voy a casar con un príncipe-

-Princesa, aunque sea me puede dar el honor de darle un abrazo si quiera-dijo Len fingiendo tristeza en la voz

Katherine se dio la vuelta y pensó…

Len aprovecho que Katherine estaba distraída y saco un puñal de su saco, y rápidamente se acercó a Katherine y la apuñalo por la espalda.
El cuerpo de la chica yacía en el suelo con una herida sangrante en la espalda.
Len sonrió tristemente y pensó: ‘‘Yo jure ser fiel al mandato del amor de mi princesa, y ahora he cumplido su orden…aunque signifique ser un asesino’’.
Len se deshizo del cuerpo de la chica, regreso al palacio a la media noche.

______________

Len entro en la habitación de Caroline, y encontró a Caroline sentada en el borde de su cama muy tranquila

-¿Ya cumpliste mi orden?-dijo Caroline muy seria.

-Si Princesa-dijo Len, luego se acercó a Caroline y se paro enfrente de ella mirándola a los ojos-
Princesa, ¿en verdad usted no estaba celosa?. Dígame la verdad por favor-dijo Len con una mirada suplicante.

-Si Len, si estaba celosa, pero celos de hermana, para mi eres mi hermano y no quiero que nadie cambie eso, yo te quiero mucho Len. Además si dejaba que te enamoraras de esa chica, tú sufrirías-

-¿Y por qué sufriría?-dijo Len algo confundido.

-Porque ella jamás te hubiera aceptado-

-Princesa, sinceramente le digo que yo no estaba enamorado de ella-

-Entonces, ¿por qué dejaste que ella te diera ese beso?-

-Princesa, no podía rechazar la muestra de afecto de una dama, eso hubiera sido algo descortés de mi parte-

-Esta bien, pero aun así te prohíbo enamorarte de otras chicas y mucho menos princesas-
-Princesa…Como diga-

-Lamento haberte dicho lo que te hizo sentir insignificante, para mi eres muy importante Len, eres el hermano que por desgracia no pude tener-

-No se preocupe, me afecto pero no mucho-

-¿Len eres mi hermano mayor, cierto?-dijo Caroline sonriendo tiernamente.

-Si, usted es mi pequeña, hermosa y querida hermanita-.

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Espero que les guste..!!!
Y Gracias otra vez por los consejos Pandora Michaelis..!!!

len!!!
ya te estrañaba T-T

estubo bueno el capitulo

espero con ansias el otro n_n

conti conti conti len me encanto te quiero XXDD :3 Twisted Evil

nya XXD

¡Yaaaaay, por fin la actualización! Ya extrañaba leerlo TTwTT y nuevamente no es nada, un placer darte consejitos Len ;3

¡Dios! Ya empezó lo trágico en éste fic, pobrecilla esa princesa inocente, estoy empezando a odiar a Caroline al igual que en "Story of Evil"... ¡Pero sigo amando la pareja que hace con Len!

Y pobre Ciel, tal parece que tanto en Universos alternativos como en el oficial de Kuroshitsuji lo obligan a casarse lololol Y vaya, pobre Sebastián, ni Len, Ciel ni nadie lo quiere, ya sea en historias oficiales o alternativas xDDDDDD

Espero ansiosa la continuación, ahora se está poniendo buena la cosa xD

¡¡NOS VEMOS!!

Bueno, muchas gracias por leer y comentar, sin ustedes no seguiria subiendo los caps..!!!

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Capitulo 5: Una Culpa y una tristeza.

Al día siguiente. Alguien llamo a las puertas del castillo. Len abrió la puerta y se encontró con un joven chico.

-¿A que ha venido?-dijo Len

-He venido a traerle un mensaje a la princesa Caroline Kenford-dijo el chico entregándole a Len una carta.

-Bien, yo le hare llegar el mensaje-dijo Len y luego cerro la puerta.

Len se dirigió hasta la habitación de Caroline para entregarle la carta. Llamo a la puerta y Caroline lo dejo pasar.
Len al entrar en la habitación se encontró con que Caroline, estaba escribiendo otro de sus poemas. Len se acercó a donde estaba Caroline

-Princesa, ha llegado esto para usted-dijo Len entregándole la carta.

-¿Quién la trajo?-dijo Caroline tomando la carta y leyéndola

-Un mensajero del reino del otro lado del mar-

-Parece que ya se corrió la noticia de que la hija del Rey Collingwood fue asesinada-dijo Caroline sonriendo maléficamente-Bien hecho, Len-

-Princesa, ¿no le preocupa que traten de buscar un culpable?-

-Ellos jamás se enteraran de que fuiste tu, hay muchos que envidian el reino al otro lado del mar-

-No preocupo por mi Princesa, por usted si, usted es una de aquellos que envidian al Rey Collingwood-

-No creo que alguien se atreva a dudar de mi, así que tranquilízate no se enteraran-

-Princesa, ¿me da permiso de retirarme?-

-Si, retírate, pero llévate esto-dijo Caroline y el entrego a Len la carta.

Len tomo la carta y se marcho a su habitación.
Ya en su habitación, Len se sentó en el borde de su cama con la carta en las manos, y comenzó a pensar sobre lo que había echo. Sin imaginarlo comenzó a llorar con solo pensar que si se enteraban que su princesa fue la causante de la muerte de esa princesa del otro reino, se la llevarían y la ejecutarían en ese preciso instante. Era muy claro para el, tenia miedo, miedo a perder a su princesa para siempre, pero el sabia que en parte tenia la culpa ya que el la mato.
Mientras Caroline se encontraba en su habitación pensando en que le extraño mucho por que Len no le había dicho por que quería retirarse. Eso le extraño mucho a Caroline ya que Len solo se retiraba cuando ella se lo ordenaba o cuando tenía alguna tarea que hacer. Caroline confundida y con mucha curiosidad decidió ir a ver que hacia Len.
Caroline fue a la habitación de Len ya que seguro podría encontrarse allí.
Al llegar a la puerta de la habitación de Len, ella con mucho sigilo entreabrió la puerta un poco y logro divisar a Len y se percato de que estaba llorando.
Caroline se sorprendió mucho ya que nunca lo había visto así, pero su sorpresa fue más grande cuando se dio cuenta de que Len tenía en las manos la carta que ella le había entregado. En ese mismo instante Caroline se puso celosa, le molestaba mucho que Len estuviera llorando por esa princesa.
Caroline no soporto más el enojo y abrió de golpe la puerta.
Len dirigió su vista a la entrada a su habitación y diviso a Caroline con una mueca de enojo en su rostro pero con lágrimas en sus ojos.

-Len-dijo Caroline mirando fijamente a Len.

-Princesa-dijo Len sorprendido limpiándose las lagrimas del rostro.

-Yo lo sabia, sabia que la amabas-dijo Caroline con enojo-Estas llorando por ella y no lo puedes negar-

Caroline no pudo retener mas sus lagrimas y se dirigió a su habitación corriendo y se encerró.
Len la siguió pero no logro alcanzarla antes de que se encerrara en su habitación.

Caroline se sentó en su cama y lloro desconsoladamente por que aunque ella no quería admitirlo en publico, ella estaba empezando a amar a su sirviente y le entristecía mucho que el no sintiera lo mismo por ella.

De pronto Caroline escucho la voz de su sirviente que estaba al otro lado de la puerta, él le dijo que lo dejara pasar.
Pero Caroline sollozando le grito que se fuera, que no quería hablar con el.
Len intento e intento decirle a su princesa que lo dejara pasar para explicarle porque lloraba pero Caroline no le hacia caso. Len no se rindió intento casi mil y un veces pero no lo lograba.

30 minutos después, Len seguía parado detrás de la puerta de la habitación de Caroline, escuchando los sollozos de su princesa.
Len decidió no seguir esperando así que forzó la cerradura de la puerta para entrar.
Al lograr entrar en la habitación, Len se encontró con su princesa aun llorando desconsoladamente.
El dolor que sentía Caroline era tan grande que no podía parar de llorar, Len había herido su corazón pero no solo era culpa de él, sino también de esa estúpida princesa que le había robado el amor de SU Len.

Len se acercó a Caroline.
-Princesa por favor déjeme explicarle porque estaba llorando-dijo Len.

Len sin resistirlo mas, abrazo a su princesa, y Caroline no se apartó, ella correspondió al abrazo.

-Princesa, yo no lloraba por la princesa Collingwood-dijo Len- Yo lloraba por que tengo miedo a que puedan culparla a usted del asesinato de esa princesa-

-¿Qué?, es decir que no llorabas por ella sino por mi-dijo Caroline separándose de Len y viéndolo de frente.

-Si, en realidad es solo que si la culpan a usted la ejecutaran, y ya no tendré a quien servir-mintió Len, él no podía decirle la verdad a su princesa, por mas que quisiera decírsela ya que a él nunca se le permitiría enamorarse de Caroline y el sabia que su princesa no sentía lo mismo por el.

Caroline gracias al consuelo de Len, dejo de llorar, pero no podía negar que aun le daba una punzada en el corazón, ya que aunque Len explico todo, él no había negado estar enamorado de esa princesa.

-Ah…ya veo-dijo Caroline-No te preocupes, no sabrán nada, a ojos de los demás nosotros no tuvimos nada que ver con eso-

-Esperemos que si princesa, pero también hay una posibilidad que puedan sospechar de nosotros-

-Eso ya no importa, esa princesa esta muerta y ya-dijo Caroline dando fin a la discusión.

_______.......Horas mas tarde.......________

Caroline estaba en su habitación y llego la hora de la merienda. Len siempre le preparaba algún postre y lo acompañaba con té.
Len entro en la habitación de Caroline con un carrito de té, en el que había una taza de té, una tetera, un azucarero y un plato con un postre.
Len le sirvió el postre y él te a Caroline.

-Vaya, que sorpresa me preparaste flan de vainilla es mi postre favorito –dijo Caroline.

-Es especialmente para usted, Princesa-dijo Len con una sonrisa en el rostro.

-Gracias, Len-

-No tiene que agradecer, Princesa-

Caroline sonrió felizmente y Len se alegro mucho.

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Muy bien, espero que les guste...una vez mas gracias por leer y comentar..!!!
Se aceptan tomatasos, abucheos, criticas, consejos, sugerencias..!!!

waaa me gusto >.<

espero el prox capitulo n_n

¡Yay! ¡Actualización! Very Happy

Primero que nada, muchas gracias por comentar el Vocal-one-shot de Kaito :3

Respecto al capítulo, ¡dios! ¡Como desespera que Len y Caroline sientan lo mismo el uno por el otro pero no se lo revelen! DDDDx

Espero la continuación.

¡¡NOS VEMOS!!

Hola..!!! Bien aqui el capitulo n° 6, vaya nunca pense que llegaria tan lejos...!!! Gracias por leer y comentar...son un gran apoyo..!!!

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Capitulo 6: Una enemistad.

Todos los días en el palacio eran iguales siempre había una que otra discusión por parte de Ciel y Caroline.
Un tarde mientras Ciel y Caroline estaban tomando té. De pronto comenzó una discusión por que Caroline empezó la discusión.
Ciel y Caroline no podían estar ni un segundo sin discutir por algo. Caroline se canso de la discusión y sin más nada que decir se fue a su habitación junto con Len.

Ciel suspiro resignado negando con la cabeza…

-Joven amo, disculpe la intromisión pero usted no debería discutir tanto con una dama-dijo Sebastián.

-Ella siempre empieza la discusión-dijo Ciel.

-Usted debería prevenirla, Joven amo-

-Tienes razón y odio que tengas razón-

-Usted debería darle una muestra de respeto o quizás aprecio-

-¿Yo apreciar a esa maniática?, jamás. Te refieres a darle un obsequio bueno aunque sé que no funcionara vale la pena hacer el intento. Un minuto, ni siquiera se por qué te estoy haciendo caso, es ridículo, pero solo por esta vez intentare hacer lo que tu dices-

-¿Entonces, que piensa obsequiarle, Joven amo?-

-No lo se, en realidad no se mucho sobre ella-

-Pues, yo creo que se quien si sabe, el joven Kendrik-

-Te refieres al sirviente de Caroline, puede ser. Hay que hablar con el pero sin que Caroline se entere-

-Es sencillo, solo hay que esperar a que el salga de la habitación de la princesa Kenford-

-Bien, hoy mismo hablare con el-

______________________
Mientras en la habitación de Caroline. Caroline estaba mirando el bello paisaje de su reino por el gran ventanal de su habitación. Mientras que Len se le quedaba mirando mientras sonreía dulcemente. Len solo pensaba: ‘‘Mi princesa es tan hermosa y tan tierna. Ella es muy importante para mi, por que sin ella yo no estaría aquí’’.

-Len-dijo Caroline volteándose a ver a Len-¿Me permites hacerte una pregunta?-

-Si, cuando usted quiera Princesa, solo pregúnteme-dijo Len saliendo de sus pensamientos

-Es algo que te he querido preguntar desde hace días, ¿por qué me abrazaste aquella vez cuando
estaba llorando?-

-Ehm…bueno, yo le di ese abrazo por que no quería que usted llorara-mintió Len otra vez y luego pensó: ‘‘Si tan solo supiera la verdad, la abrace por que ya no puedo contener mas todo este amor que siento por usted’’.

-Ah bueno, gracias por que eso si me…reconforto o eso creo-

-Princesa, me intrigaba por que estaba llorando usted pero ahora lo se-

-¿Ha si, por que supones que yo lloraba?-

-Usted lloraba por que estaba tan enojada conmigo que no podía expresarse de otra forma más que llorando. Pero lamento mucho haber causado que usted llorara, Princesa-

-No importa ya, el pasado se deja atrás-

-Discúlpeme Princesa, pero tengo que ir a supervisar el trabajo de los demás sirvientes. Vuelvo dentro de unos segundos-

-Claro-dijo Caroline sonriendo.

Len sonrió, hizo una pequeña reverencia y salió de la habitación cerrando la puerta.

Len se dirigió a los jardines a supervisar el trabajo de los jardineros, pero cuando iba hacia la entrada principal una voz lo llamo, Len volteo a ver quien era y se encontró con el príncipe Ciel junto a su mayordomo Sebastián.

-Eh, tu sirviente-dijo Ciel llamando a Len.

-¿Qué desea, Príncipe Phantomhive?-dijo Len

-Te llamas Daniel, ¿no?-

-Si-

-Pero he visto que Caroline te llama Len, ¿por qué?-

-Ella me ha llamado así desde que éramos niños, y solo ella me puede decir Len, nadie mas-

-Bien, tranquilo solo pregunte. Ya que se conocen desde niños, debes conocerla bien, ¿no?-

-Si, prácticamente lo se todo de ella, ¿pero a que viene esto, Príncipe Phantomhive?-

-Quisiera hacerte algunas preguntas sobre Caroline-

-¿Por qué?-

-Es que estoy preparando un obsequio para ella, y necesito saber un poco más sobre sus gustos-

-Eso depende de lo que quiera saber, Príncipe Phantomhive-

-Vamos al salón principal y hay me dirás todo-

Len, Ciel y Sebastián fueron al salón principal del palacio.

-Bien, Daniel dime, ¿cuales son las flores favoritas de Caroline?-dijo Ciel.

-Su flor favorita son los tulipanes-dijo Len.

-¿Cuál es su joya favorita?-

-Su joya favorita, es difícil ya que le gustan todas pero si ella escogiera una, seria el zafiro-

-¿Cuál es su color favorito?-

-Rojo, le encanta ese color-

-¿Qué escogería ella Oro, Plata o bronce?-

-Oro o plata-

-Yo conozco la mayor parte de su personalidad, pero quisiera saber que hay mas allá de esa maldad que ella tiene, es decir supongo creo que a ti te tratara bien, ¿no?-

-Si, me trata bien. Si se refiere a su personalidad mas allá de esa maldad que la caracteriza, ella es muy tierna, romántica, alegre, de mente abierta y ella es una persona que comprende los sentimientos de los demás aunque no muestre mucho el lado amable de su personalidad-

-¿Es…enserio?-dijo Ciel muy sorprendido.

-Si, enserio-

-Bien…creo, ahora sigamos con las preguntas-

15 minutos después…

-Gracias Daniel eso era todo lo que quería saber, ahora puedes retirarte-dijo Ciel.

-Como diga, Príncipe Phantomhive-dijo Len y se fue de la habitación.

___________________________________________________

Espero que les guste..!!!
Aqui una foto de Caroline y Len..!! La decore un poco..!!!

Spoiler:

waaaaaaaaaaa!!!!!! le te quiero *¬* conti conti conti El Sirviente y La Princesa {EPILOGO actualizado} 234636

me gusto la imagen donde sales te ves bonito len El Sirviente y La Princesa {EPILOGO actualizado} 549560

lectora seguidora lencito Entusiasmo

waaa me gusto tu historia y la imagen *.*

espero el siguiente capitulo

la historia se empieza poner buena n_n

¡Kyaaa! Me gustó mucho el capi (y eso que comencé a leerlo hoy xD). ^^

Espero con ansias la conti, está muy bonito, y también empieza a ponerse bueno, jeje...

Saludos, Mizuki.

PD: Te quedó muy bonita la imagen n.n

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