Metal Gear, su narrativa [Reportaje-cronologia]

En estos días trataré de renovar un poco esta sección, y actualizar los temas.

Hay un tema para la saga de MGS pero debo retocarlo y demás... ya que hay cosas obsoletas con las nuevas versiones, así que de momento y con motivo del anuncio oficial de la fecha de lanzamiento de MGSV abro este tema ^^.

Metal Gear es una saga muy.... muy larga e intrincada, y para poder entender la historia de la nueva y quinta entrega que nos llegará en setiembre, dejaré un resumen de la historia de la saga, así es más fácil entender las intenciones, ideales y acciones de cada uno de los personajes.

El resumen está extraído de IGN, porque se explican muy bien, mientras que yo en un intento de explicarlo TODO les liaría más XD.

Sin más... aquí les dejo el texto:

Todo empezó con el lanzamiento de la primera entrega de la saga Metal Gear. Ocurrió exactamente el 7 de julio de 1987 a los ordenadores MSX. Desde entonces, la obra de Hideo Kojima se considera como una de las marcas referentes en la industria del ocio electrónico, consagrándose con cada nueva iteración.

Casi tres décadas dan para mucho, y en todos estos años se ha ido labrando una de las tramas más apasionantes del sector. Sobre todo si tenemos en cuenta la especial importancia que le da el creador nipón al argumento de sus juegos, que se desglosa en escenas de gran duración y de corte cinematográfico. Gusten o no, son el sustento de la serie de videojuegos de infiltración por excelencia.

Sin embargo, tanto el extensísimo guion como las numerosas entregas han provocado que muchos usuarios estén perdidos sobre lo que ha ido ocurriendo. Especialmente cuando se intercalan entregas con diferente protagonista y marco temporal. Por ello, y aprovechando que en el horizonte divisamos Metal Gear Solid V: The Phantom Pain, vamos a hacer un completo resumen de los acontecimientos más importantes de la saga desde su nacimiento.

Antes de comenzar, queremos aclarar un par de matices. Obviamente, el texto está cargado de spoilers, por lo que es vuestra responsabilidad continuar leyendo o no. También, aconsejamos fervientemente que os animéis y completéis las aventuras de la saga que os queden pendientes, ya que en su interior se esconden muchos elementos secundarios que aquí van a pasar desapercibidos. El universo de Metal Gear es intensísimo, y detallar cada uno de sus rescoldos sería un trabajo de chinos.

Por último, solo queda especificar que hablaremos de la línea argumental de las aventuras de Snake y Big Boss cronológicamente a su historia, no a la publicación de los juegos. Este reportaje solo se centra en elementos argumentales, y no en otros factores como los jugables o las plataformas en las que han aparecido. Tampoco tienen cabida en este texto los numerosos spin-offs publicados hasta la fecha.

Transcurre el año 1964 y uno de los momentos más tensos de la época debido a la Guerra Fría. Los Estados Unidos habían recibido información sobre una devastadora arma nuclear que la URSS estaba desarrollando y que inclinaría del lado de los soviéticos la balanza en el conflicto. Para evitarlo, el gobierno norteamericano dio comienzo a la “Misión Virtuosa”, donde un joven conocido por el sobrenombre Naked Snake (Big Boss, pero aun no había sido condecorado con ese rango) tenía como objetivo infiltrarse en la región rusa de Tselinoyarsk y recuperar al científico Nikolai Stepanovich Sokolov, principal responsable del prototipo nuclear secreto.

En plena huída con el científico, Naked Snake y Sokolov son retenidos por el Coronel Volgin, del GRU. Lo que no esperaba el protagonista era la presencia en el otro bando de The Boss, su mentora y una madre para él. No conforme con desertar, la que era conocida por ser una soldado legendaria arrojó a su discípulo por un puente. Tras ello, y con Sokolov en su poder, Volgin lanza una cabeza nuclear sobre la planta de desarrollo del científico, haciendo que las miras se centren en un ataque directo de los Estados Unidos y quedar al borde de una guerra nuclear entre ambos bandos.

El desarrollo de Metal Gear Solid 3: Snake Eater se desarrolla partiendo de dos claros contextos: el político y el emocional.


El primer punto parte en base al Legado de los Filósofos, una fortuna reunida por los hombres más poderosos de las tres grandes potencias del siglo XX: Estados Unidos, Unión Soviética y la República Popular de China. Este chip albergaba una cantidad ingente de dinero que superaba los cien billones de dólares, fondos necesarios para financiar hasta cinco conflictos mundiales. Tras concluir la Segunda Guerra Mundial, el microfilm cayó en manos del padre de Volgin, quien posteriormente lo heredaría para el desarrollo del arma nuclear Shagohod. Al final del juego, es finalmente Revolver Ocelot quien recupera la mitad del legado.

Por otro lado, nos encontramos sin ningún tipo de duda ante la entrega más emotiva de la franquicia. Esto se debe a la relación entre Big Boss y The Boss. Ambos respetaban los códigos de conducta ética al ser dos soldados de mucho valor, pero entre ambos había una relación más cercana a la de una madre y un hijo. Todo lo que hace The Boss es para ayudar a su alumno a cumplir su misión, a pesar de que ella pueda ser la perjudicada. Esto acarrea en un precioso combate final en un campo de flores, en el que Snake debe acabar con su mentora para cumplir su misión. El quedó como un héroe y ella como una traidora. Muy pocos sabían lo que ocurrió en realidad.




Es difícil tener en cuenta una entrega que el propio Hideo Kojima borra del mapa al no haber ejercido como director del juego, sino como productor. En ningún momento se menciona a Metal Gear Solid: Portable Ops, que fue el estreno de la serie en PSP. El creador nipón lo obvia cada vez que le preguntan por el ámbito argumental de la saga. Sin embargo, a pesar de su testimonial aportación, la aventura esconde detalles muy importantes que no hay que pasar por alto, ya que aquí en este punto nacen nuevos nombres y se forjan nuevas amistades.

Todo comienza a finales de 1970, con un Snake ya condecorado como Big Boss después de los acontecimientos ocurridos en Metal Gear Solid 3. Varios miembros de la unidad FOX se han vuelto corruptos y acusan al protagonista de participar en esta rebelión liderada por Gene, quien en su poder tiene un arma nuclear llamado Metal Gear Raxa que pretende lanzarla al Pentágono para dañar a los Filósofos. Cómo no, Big Boss lo evita.

Aquí apreciamos los primeros visos del cambio de personalidad de Big Boss, que se va transformando en un ser más taciturno. En Portable Ops conoce a personajes importantes para su futuro, como Roy Campbell o Frank Jaeger. Con su ayuda, va derrotando a miembros de la unidad FOX mientras recluta a nuevos soldados para fundar Fox Hound y adquirir los fondos necesarios para fundar Millitaires Sains Frontières.

El Legado de los Filósofos tiene una importancia suprema. Aunque todo se desglosa por medio de una escena al final del juego, en la que vemos a Revolver Ocelot asesinando al director general de la CIA y haciéndose con la mitad restante. Detrás de estos actos se encontraba el Major Zero. Con el dinero obtenido, se funda la organización Los Patriots.




Puede parecer que no, pero es muy importante estar al día de lo ocurrido en Metal Gear Solid: Peace Walker para no estar perdidos de cara al próximo The Phantom Pain. A pesar de ser una entrega pensada para el concepto portátil, argumentalmente esconde muchos aspectos importantes claves en el futuro de la franquicia para esclarecer las acciones de Big Boss. De hecho, el propio Kojima ha manifestado en más de una ocasión que esta entrega debería haber sido Metal Gear Solid V.

Ambientado en el año 1974, Big Boss se encuentra junto con su compañero Kazuhira Miller dirigiendo la organización que ellos mismos habían fundado: Militaires Sans Frontières. Entonces, el profesor universitario Ramón Gálvez y su alumna Paz Ortega, se dirigen a ellos con el objetivo de que expulsen del lugar a una organización que está realizando actividades sospechosas, y que había secuestrado a la joven mientras investigaba la zona. En un principio rehúsan la oferta, pero entonces, Gálvez se saca de su chaqueta un cassette que incluye una grabación en la que se escucha la voz de The Boss. Esto provoca que Big Boss acepte con la esperanza de que su mentora siga viva de algún modo.

Durante la aventura, Big Boss conoce a personajes importantes como el científico Huey o Chico, a quien debe rescatar en alguna ocasión. En el trasfondo, el protagonista recluta soldados para su organización mientras construye su propio Metal Gear, llamado Zeke. A su vez, debe detener la amenaza de otro arma nuclear llamado Peace Walker. Cuando está a punto de conseguirlo en la torre de control de una base militar norteamericana situada en Nicaragua, repentinamente hace acto de presencia el profesor Ramón Gálvez, que realmente es un agente doble de la KGB llamado Vladimir Zadornov. Afortunadamente, en ese momento aparece parte del equipo de Militaires Sans Frontières y le capturan. Y por supuesto, Snake se encamina a apagar definitivamente Peace Walker.

Pero ahí no termina todo. Cuando parecía que reinaba la tranquilidad, Paz Ortega roba el Metal Gear Zeke y se revela como una agente doble que trabaja para Major Zero y su organización Los Patriots. Tras enfrentarse a la joven y al arma que pilota, ésta sale despedida al océano. Miller le confiesa que conocía desde el principio la identidad tanto de Ramón Gálvez como de Paz Ortega, así como que todo el mundo conoce ya las acciones de Militaires Sans Frontières. Big Boss concluye dando un discurso afirmando con ímpetu “Este es nuestro hogar. Esto es Outer Heaven”.



Dejando a un lado los experimentos de Hideo Kojima para lanzar un mismo juego en dos partes con un año de diferencia, todos estamos expectantes de saber lo que ocurrirá en Metal Gear Solid V, donde se unirán los nexos y conoceremos los motivos del denominado como ‘descenso a los infiernos’ de Big Boss para rebelarse contra el mundo.

Ground Zeroes transcurre en 1975. Big Boss debe adentrarse en un campamento situado en Cuba para rescatar a dos viejos conocidos de Metal Gear Solid: Peace Walker. La agente doble Paz Ortega y Chico, que fue capturado por el ejército hostil tras salir en la búsqueda de su amada. Tras recuperar a ambos y presenciar la destrucción de la Mother Base que tanto esfuerzo le había costado construir, descubre que Paz tiene en su interior una bomba que explota, provocando un accidente que lo deja en coma durante nada menos que nueve años.


The Phantom Pain tendrá lugar en el año 1984, exactamente cuando Big Boss despierta del coma. Esto le provoca daños psicológicos que hacen aumentar su ira hacia quienes pretenden acabar con él. Por ello, y de nuevo junto con Kazuhira Miller, funda la organización Diamond Dogs con la venganza entre ceja y ceja. En uno de los tráilers publicados dice “Cipher ha llegado muy lejos y hay que detenerlo”, haciendo referencia a Zero y su organización.

Ya hay fecha para la llegada de Metal Gear Solid V: The Phantom Pain ( 1 de setiembre),  la espera valdrá la pena pues es seguro que conoceremos muchos detalles todavía desconocidos en la franquicia que llevan a Big Boss a ser, aparentemente, un villano para todo el mundo.
También, se espera que se conozcan más detalles del proyecto “Les Enfants Terribles”, con el que se dio vida a los tres hijos de Big Boss: Solid, Solidus y Liquid snake ( David, George y Eli, respectivamente).



Las tramas protagonizadas por Big Boss dejan lugar a su descendiente más conocido: Solid Snake. Como veis, aunque en la línea temporal ocupa una posición central, se trata de la primera entrega de la franquicia, publicada nada menos que hace veintisiete años para MSX.

Es el año 1995, y en una localidad al norte de Sudáfrica se ha levantado una fortaleza llamada Outer Heaven, que en su interior esconde el desarrollo de un arma de destrucción masiva. La unidad FoxHound envía al lugar a uno de sus mejores soldados: Gray Fox (Frank Jaeger) en la misión conocida como "Operation: Intrude N313". Tras perder el contacto con él, Big Boss, como líder de la organización, envía al lugar a un soldado novato llamado Solid Snake para que rescate a su compañero y concluya la tarea encomendada.

Tras derrotar a una multitud de enemigos y sortear infinidad de trampas puestas a propósito, Solid Snake descubre que quien está detrás de la fortaleza no es otro que Big Boss, quien le había guiado por radio por el lugar. El objetivo de Big Boss era capturar a Solid Snake, pero había subestimado las capacidades del soldado, quien destruyó el arma nuclear llamada Metal Gear TX-55 y presumiblemente, acaba con Big Boss tras vencerle en la batalla y hacer que el lugar salte por los aires.


Después del éxito cosechado por la primera entrega, tres años después llegó al mercado Metal Gear 2: Solid Snake, la secuela y el que para muchos es el mejor juego de la serie. En él, se recrean varios momentos épicos que pasaron a los anales de la historia del mundo de los videojuegos.

La aventura tiene lugar en el año 1999. El mundo se enfrenta a una crisis energética en la que el suministro de petróleo está a punto de terminar. Sin embargo, el biólogo checo Dr. Kio Marv inventa el OILIX, un microorganismo que refina el petróleo produciendo una forma de este altamente purificada. Tras bastantes avances, el inventor de este elemento es secuestrado por los soldados de Zanzibar Land, un régimen militar democrático que surgió en aquella época y que pretendía dominar el mundo controlando el suministro de fuel y el armamento nuclear.

Para detenerlo, la unidad FoxHound, esta vez comandada por el Coronel Roy Campbell, envía a Solid Snake. Durante su investigación, el héroe descubre que allí se está fabricando el Metal Gear D, una versión mejorada del tanque bípedo con capacidad nuclear. Y que al mando de las fuerzas de Zanzibar Land se encuentra Big Boss, quien no había muerto en su anterior batalla.

Solid Snake se encuentra con su antiguo camarada Gray Fox, quien se posiciona en el bando enemigo y al que vence dos veces, una a bordo de Metal Gear D y otra en un combate cuerpo a cuerpo sobre un campo minado. Tras vencerle, se dirige a poner fin de una vez por todas a la situación, luchando contra Big Boss hasta acabar con su vida por medio de un lanzallamas improvisado.



La entrega con la que la saga se dio a conocer en el mundo entero llegó en PlayStation con Metal Gear Solid. Si bien repetía muchos elementos procedentes de las dos entregas anteriores, a día de hoy se sigue considerando como uno de los mejores videojuegos de la historia debido a su apuesta por el sigilo, su originalidad y por supuesto su transfondo argumental y cinematográfico.

Es el año 2005 y Solid Snake regresa tras seis años fuera del servicio activo para dirigirse, comandado de nuevo por el Coronel Roy Campbell, a la isla de Shadow Moses, situada en el archipiélago Fox de Alaska. Allí, la unidad FoxHound se ha revelado y amenaza con lanzar un ataque nuclear gracias a la potencia de su nuevo arma, Metal Gear REX, si no consiguen los restos de Big Boss en el periodo de tiempo establecido. Además, allí Solid Snake debe rescatar al jefe de DARPA Donald Anderson y al presidente de ArmsTech Kenneth Baker. Pero tras encontrarlos ambos mueren de una especie de ataque al corazón.

Snake avanza por las instalaciones ayudado en gran parte por el científico Otacon y por Meryl Silverburgh, una joven y novata soldado que además era la sobrina de Roy Campbell. Después de acabar con todos los miembros genéticamente modificados de la unidad FoxHound, el protagonista descubre que su hermano Liquid, quien se había hecho pasar por Miller para ayudarle, es quien está a los mandos de la operación. Es entonces cuando le explica que ambos son producto del proyecto Les Enfants Terribles, un proyecto patrocinado para clonar a Big Boss, el soldado perfecto. Liquid le explica a su hermano que el gobierno le ha enviado a esta misión para propagar el virus FoxDie que la doctora Naomi Hunter le había inyectado a Snake sin saberlo. Esto provocaría que todo el personal muriera contagiado y el gobierno pudiera recuperar Metal Gear REX de una pieza.

Después de destruir a Metal Gear REX en un trepidante combate, Snake y Liquid se enfrentan en un combate cuerpo a cuerpo. Tras vencerle, Snake huye con Meryl pero es perseguido por su hermano biológico. Tras una secuencia de huída en jeeps, Liquid muere debido al virus FoxDie.



Metal Gear Solid 2: Sons of Liberty es quizás la entrega más polémica de la franquicia, debido a que el protagonismo de la aventura no sea íntegro para Solid Snake, sino que la mayor parte del juego transcurre bajo el control de Raiden, un desconocido en aquel entonces.

Esto provoca que el juego se divida en dos episodios. El primero de ellos transcurre en el año 2007, dos años después de lo sucedido en Shadow Moses. Esta vez, Snake ha creado la ONG Philantrophy junto con Otacon. Ambos investigan la creación de un nuevo Metal Gear anfibio. Para ello, se inmiscuyen dentro del barco U.S.S Discovery, que navega por las inmediaciones del río Hudson. El protagonista logra fotografiar a Ray, que es como se llama el prototipo del arma nuclear. Pero en ese momento, hace acto de presencia Revolver Ocelot, quien parece sufrir trastornos de personalidad debido al implante del brazo de Liquid Snake. A pesar de ello, consigue huir del lugar a bordo de Metal Gear Ray.

La segunda parte está protagonizada por Raiden, concretamente el 29 de abril del año 2009. Su misión es infiltrarse en una planta de limpieza medioambiental llamada Big Shell construida en el lugar dode se hundió el barco. Allí debe rescatar a los rehenes que un grupo terrorista tiene allí presos. Entre ellos se encuentra el mismísimo presidente de los Estados Unidos.

Raiden avanza acabando con los miembros de la unidad Dead Cell, liderada por George Sears, más conocido como Solidus Snake (Tercer hijo/clon de Big Boss), quien fue el antecesor del presidente Johnson como mandamás de los Estados Unidos. El nuevo protagonista descubre que el Big Shell realmente se construyó para camuflar el Arsenal Gear, una herramienta creada por Los Patriots para garantizar la supremacía de Estados Unidos y controlar las acciones de cualquier acontecimiento del mundo por medio del programa de Inteligencia Articificial GW (iniciales de George Washington), que permite manipular todo tipo de información en medios de comunicación como la televisión o internet. Solidus pretendía liberar a los Estados Unidos de Los Patriots por medio de Arsenal Gear y fundar una nación libre llamada “Sons of Liberty”. Pero realmente, fue una marioneta en manos de la misteriosa organización, ya que "Liquid" Ocelot se desveló como un agente de Los Patriots enviado para asegurar que los acontecimientos ocurrían tal y como ellos querían.

Arsenal Gear también servía como base de operaciones para la construcción en cadena de Metal Gear Ray. Raiden es ayudado por Solid Snake, que había estado oculto en el recinto bajo el nombre de Iroquois Pliskin. Raiden acaba con Solidus Snake y Solid Snake se arrojó al mar tras Liquid Ocelot, quien había escapado con un Metal Gear Ray. Mientras tanto, se descubren los nombres del comité de sabios que fundaron Los Filósofos, con un nombre que destacaba por encima del resto.



Con el objetivo de cerrar una trama majestuosa llegó al mercado Metal Gear Solid 4: Guns of the Patriots. De nuevo, el protagonismo al completo recaía sobre Solid Snake, quien aparece con un estado de considerable vejez debido a la degeneración celular causada por su naturaleza de clon ( padece de envejecimiento prematuro). Debido a ello, al legendario héroe apenas le quedan unos meses de vida.

Solid Snake tenía que ir tras Liquid Ocelot, quien aparentemente controlaba a las cinco PMCs más importantes del mundo, con el supuesto objetivo de crear una insurrección a nivel mundial y poner fin a la supremacía de Los Patriots. Además, todos los patrones de los soldados, tanto físicos como psíquicos estaban controlados por un sistema de nanomáquinas orquestado por Los Patriots.

A mitad de la aventura, hace acto de presencia Eva, quien había sido un personaje clave en Metal Gear Solid 3 y ahora custodia los restos mortales de Big Boss. Solid Snake supo gracias a ella que el objetivo de Liquid Ocelot no es acabar con Los Patriots, sino hacerse con los restos de Big Boss para acceder al sistema Sons of the Patriots, un mecanismo ideado por dicha organización. Sin embargo, Eva fallece y Ocelot se hace con los restos de ADN que necesitaba del soldado legendario, por lo que se encamina a destrozar todo el sistema de IAs que ejercen el control sobre el mundo.

A partir de ese momento es donde da comienzo un trepidante climax final que se extiende durante las últimas horas de aventura. Snake debía inmiscuirse en un gigantesco buque llamado Outer Heaven, igual que la fortaleza de la primera entrega de la saga. Allí, tenía que introducir el virus FoxAlive, creado por Naomi Hunter y Sunny, la hija de Olga Gurlukovich, en todo el entramado de IAs de Los Patriots. La propia Naomi le explica a Snake que esta organización no solo tenía como objetivo controlar a los soldados, sino también a todos los gobiernos del mundo en el futuro. Gracias a s destrucción, la humanidad quedaría libre de ser controlada por terceros para siempre.

La batalla final es un espectacular combate cuerpo a cuerpo entre Solid Snake y Liquid Ocelot, donde Kojima se saca una pieza excepcional demostrando que Ocelot en ningún momento había sido el villano de la aventura, sino todo lo contrario. Había interpretado un papel desde el principio para acabar con Los Patriots. Sus acciones tenían que ser verosímiles para que la organización no sospechara en ningún momento, incluso fingió que el brazo de Liquid le poseía para que nadie descubriera su auténtico propósito. A pesar de todo, Ocelot había sido uno de los grandes salvadores del mundo.

Pero todavía quedaba más. En una emocionante escena final, Solid Snake se reencuentra con Big Boss, quien no había estado muerto, sino en coma inducido bajo el control de las IA's. Junto a él, también hacía acto de presencia en estado vegetativo uno de los personajes más importantes de la trama: Zero. El soldado legendario le explica a su hijo que Los Patriots fueron fundados bajo las doctrinas de The Boss por el propio Big Boss, Eva, Sigint, Para-Medic, Ocelot y Zero. Básicamente, todo el plantel de Metal Gear Solid 3. El grupo se disolvió por las ansias de poder y control de Zero, que continuó el plan por su cuenta y orquestó unas IAs que cobraban vida propia.

Ocelot y Eva crearon un plan para acabar con estas Inteligencias Artificiales. Para ello, tenían que acabar con todos los miembros fundadores de Los Patriots sin levantar sospechas. Para-Medic murió antes de los acontecimientos de Metal Gear Solid; Sigint era realmente Donald Anderson, el jefe de DARPA en Shadow Moses. Tras la muerte de Eva y Ocelot, Big Boss desconecta a Zero de la máquina que le mantenía con vida. Después de esto, el gran héroe respira intencionadamente el nuevo virus FoxDie que le había inyectado a su hijo para perecer enfundado en un abrazo con su descendiente. El ciclo había terminado, Los PATRIOTS habían dejado de existir y Solid Snake, se retira a pasar sus últimos días de vida en paz.



“La paz entre los hombres que viven en sociedad no es un estado natural. Por el contrario, el estado natural del hombre es la guerra. Guerra que se manifiesta no sólo como hostilidad abierta, sino también como una amenaza constante de hostilidad. La paz, por lo tanto, es un estado que debe establecerse por ley.” (Inmanuel Kant, ‘La paz perpetua’)

La Guerra Fría entre Estados Unidos y la antigua URSS supuso para el mundo una amenaza jamás vista antes, más peligrosa aún que la Gran Guerra de la que acababa de salir la humanidad. El fantasma nuclear estaba más presente que nunca, y el temor a un estallido de las hostilidades entre los dos grandes ejes era una pesadilla que se cernía sobre la población mundial. Se dice que el máximo de tensión en este absurdo conflicto llegó con la famosa crisis de los misiles nucleares de Cuba, momento, según los entendidos, en el que el mundo ha estado más cerca del apocalipsis atómico.

Hideo Kojima, creador de la saga Metal Gear Solid, que nació en 1963, en plena Guerra Fría, inicia su gran creación en ese instante, y alrededor de esa amenaza de la que el ser humano jamás estará libre. Probablemente, su fijación por todo lo que rodea la tecnología nuclear se deba a que pertenece al único país que ha visto y padecido un ataque atómico. Las tragedias de Hiroshima y Nagasaki dejaron una impronta imperecedera en el pueblo japonés, y no es de extrañar que su Constitución sea de corte pacifista, y excluya cualquier ejército con fines bélicos; un país que realmente aprendió de la Historia, al contrario que la mayoría.

En Peace Walker por ejemplo, Kojima hace hincapié en los países que proclaman la paz desde la misma base de su ordenamiento jurídico, y sitúa la acción en Costa Rica, país ejemplar que carece de cualquier ejército, ¡que alcanzó la paz sin militares! Parece mentira que el resto de países no aprendan de estos regímenes pacíficos.

El profundo sentimiento anti-belicista de Kojima impregna cada plano, cada secuencia, cada diálogo de su obra, y sus dos grandes personajes -héroes antológicos, inolvidables-, dedican su vida exclusivamente a acabar con la amenaza nuclear. No tienen país, ni ideología, ni bandera (pese a que en un principio sirven lealmente a su patria, a su misión, pero se darán cuenta de que una patria es sólo de los que la manejan), son seres denostados, atormentados por la traición de sus países a sus propios principios, y Kojima pone de relieve, nos lanza a la cara, que absolutamente ningún Estado merece la más mínima reverencia, ninguna obediencia, que todos somos meros peones para sustentar las ambiciones y ansias de dominio de sus dirigentes. Es una bofetada a la servidumbre, a la mentira con la que es inoculado el pueblo (hay un momento donde alguien se pregunta que si todo es mentira, dónde está la verdad, a lo que obtiene como respuesta: “la verdad está ahí, oculta entre todas las mentiras, sólo hay que buscarla”).

La paz, ese anhelo de millones de personas parece casi imposible sin un término que Kojima introduce reiteradamente en sus trabajos, la “disuasión”. ¿Qué es esto? Simplemente la posesión de un armamento lo suficientemente poderoso para “disuadir” de posibles ataques enemigos. Esto lleva a un hiperdesarrollo de la armamentística de cada estado para evitar una agresión, a través del miedo a su arsenal militar y nuclear. EEUU, cómo no, son los que más lejos han llevado este concepto, ¿alguien se atrevería a atacar y declarar una guerra abierta a una de las potencias nucleares? (excluyendo fanáticos radicales que actúan más por fe que por otra cosa). Mientras el concepto de disuasión exista, dice Kojima, existirán países belicosos, con armamento suficiente para declarar una guerra a gran escala.

Metal Gear Solid, habla abiertamente de paz, sin tapujos, de la utopía de un mundo sin fronteras, de la rebelión contra los poderes totalitarios que dominan cualquier país (hasta los democráticos, inmersos en dictaduras encubiertas), de que a veces una revolución es preferible a la opresión, que la mansedumbre sólo lleva a ser manejados como viles corderos. Y el gran héroe, ese militar condenado a luchar en la clandestinidad por la traición de su gobierno y su país (al fin y al cabo, todo gobierno y todo país acaba abandonando a aquellos que dice amparar), es comparado con los grandes libertadores suramericanos como el Che o Sandino, no por sus ideales políticos -aquí no hay política que valga-, sino por su concepto de libertad y sobre todo de paz, por romper las fronteras que hacen del mundo un lugar verdaderamente peligroso. Ese era el sueño e ideario del gran personaje que arranca la saga, y son sus discípulos los que deberán encargarse de cumplir esa quimera. Kojima lanza al mundo la cuestión más simple pero también la más compleja: ¿por qué se fracturó el mundo? ¿no hubiera sido más fácil dejarlo como estaba? Esto es extensible a cualquier frontera, a cualquier país. La guerra es lo que el ser humano ha usado como herramienta para definir esos límites, unos límites que acotan no sólo la libertad y la razón, sino la paz, que se ve presa por esos muros que los beligerantes gobiernos han levantado a lo largo de los siglos.
Ese es el mensaje de Kojima, su gran legado, incomparable, humano, necesario, imperecedero.


Para todos aquellos que hayan sabido interpretar más allá de la simple acción o trama de Metal Gear sabrán que Hideo Kojima siempre nos ha dejado intensos mensajes de carácter politico-militar en sus juegos, y usando ademas momentos históricos clave para darle más peso argumental. Pues bien el propio director, ha dicho que en su ultimo juego Metal Gear. The Phantom Pain cuestionara la imagen de Estados Unidos como el centro del mundo actual.


Ademas el director Japonés no ha perdido la oportunidad para criticar abiertamente el estilo de cine hollywoodense, comenta que se puede hacer cine para entretener, pero fuera del siempre recurso de que es el ejercito americano el que nos libera de un ataque alienigena, de una amenaza, siempre abanderando como los salvadores del mundo.


Quien haya disfrutado de Ground Zeroes se abra percatado de la critica abismal que el director japonés realiza sobre la prisión ilegal de Guantanamo en Cuba.


Kojima siempre ha mostrado un intenso mensaje anti bélico en sus obras a pesar de tratarse de una saga bélica, y en Phantom Pain llevara esta filosofía a un nuevo nivel, posiblemente más crudo, más real y más creíble que haya echo hasta la fecha.

En esta nueva entrega se presentaran los conflictos de la raza-etnia, el sexo, la venganza, etc.